miércoles, 4 de enero de 2012

Hasta siempre Ventuchis!!!




Internet me dió la oportunidad de conocer mucha gente, con las que he compartido por años correos, charlas y hasta reuniones para conocernos. Entre ellos estaba Andrés, "Ventuchis" , un Asturiano de 77 años, tan lindo de Alma, cómo su tierra. Y por ser de allá, de la tierra de mi abuela Olvido, senti por él un cariño especial, supo escucharme, enseñarme y acompañarme en muchos momentos buenos y malos, con su gran sabiduría y con su respeto de hombre de bien.La vida me dió la oportunidad de conocerlo personalmente, no hace mucho en Madrid y desde entonces, llevo colcago a mi cuello el triskel que me regalo. Dejo de existir fisicamente, pero vivirá en mi corazón por siempre. Que descanses en paz mi querido Vento. ¡Te quiero y te admiro mucho!

martes, 3 de enero de 2012

AÑO NUEVO... VIDA NUEVA...


AÑO NUEVO, VIDA NUEVA…
Voy a comenzar el año confesando algo que me esta sucediendo y que no puedo reprimir más.
Sé que esta confesión no va a caer muy bien en algunas personas de mi entorno, especialmente hijas y nietos, que son quienes más me preocupan, pero deberán entender y aceptar.
Les pido mil disculpas si esto les provoca dolor, aclaro que no es mi intención hacer sufrir a nadie y les aseguro que hice lo imposible para No llegar a esta instancia, pero uno propone, Dios dispone y las redes sociales hacen el resto, fue así que conocí al tano.
Enfrente una lucha interna, ardua y en soledad hasta llegar a esta situación.
Me resistí, mientras pude y hasta me negué a mi misma, lo que me estaba pasando.
Pero al final, pudo más el constante empeño que puso él, para llegar a persuadirme de que no se puede luchar contra la corriente. Que hay que dejar que fluya lo que uno siente y vivirlo lo mejor posible. Eso si, con dignidad.
Admito que logró su cometido, que me cautivo, casi sin darme cuenta. Cómo buen seductor, se tomó su tiempo, no me acechó de manera impetuosa, fue despacio, pero constante y firme.
Y me conquistó de tal manera, que me modifica todos los sentidos. Me seduce a tal punto, que por momentos me olvido de todo.
Su presencia, esta a mi lado, dónde quiera que yo este, haciéndome sentir cómo una adolescente transitando por transformaciones endocrinas y morfológicas y variabilidad de estados de ánimos.
Tan pronto me fastidio, o enfado, o padezco miedos, cómo agrado, euforia o coraje enfrentando prejuicios. ¡Un sin fin de sensaciones!. Me nubla la vista, me ciega, me deja sin aliento, me marea, me agita, me perturba, me acalora, me desvela.
Me resulta ya muy difícil de ocultar todo esto, así que en un acto de valentía reconozco públicamente que estoy, cómo se suele decir,
“hasta los huesos” con el tano. ¡FRANCO DETERIORO!, ¡es el dueño del resto de mi vida! .